ADAPTACIÓN AL CAMBIO CLIMÁTICO

ADAPTING TO CLIMATE CHANGE

Como importante producto agrícola cultivado en los trópicos, el café es particularmente susceptible a los efectos del cambio climático. El resultado general será una disminución tanto en la cantidad como en la calidad del café, así como un aumento en el costo de producción. Aunque aún quedan muchos cambios importantes por venir, los productores ya están tomando medidas para adaptar su producción a la luz de las alteraciones de las precipitaciones, la temperatura, la humedad, las plagas y más. Las adaptaciones varían según la causa subyacente que se aborda, y tanto los investigadores como los productores agrícolas prefieren un enfoque múltiple.

ADAPTACIÓN AL CAMBIO CLIMÁTICO

Quizás el impacto más importante que probablemente cause el cambio climático sea un cambio en el panorama de producción global. Algunas zonas cafetaleras tradicionales dejarán de ser viables para el café y otras zonas ocuparán su lugar. Dado que la mayor parte del cultivo de café está a cargo de pequeños agricultores, la diversificación y sustitución de cultivos será esencial para la estabilidad económica y social de las zonas que dependen del café. Otras regiones aún podrán producir, pero necesitarán capacitación y otro tipo de asistencia para adoptar nuevas prácticas agrícolas.

ADAPTACIÓN AL CAMBIO CLIMÁTICO

Los grandes fenómenos meteorológicos extremos también se están volviendo más comunes con la aparición del cambio climático. Para los productores de café, eso significa lidiar con sequías, inundaciones, tormentas tropicales, deslizamientos de tierra, erosión del suelo y más. Más allá de los impactos obvios de los desastres naturales, incluso cambios menores en el clima pueden afectar negativamente la producción de café. Los daños a los árboles, la floración temprana o tardía, el aumento de plagas, el marchitamiento y los problemas con la infraestructura pasan factura a la cosecha.

La capacitación de los productores de café se ha centrado en la “capacidad de adaptación”, aumentando la capacidad tanto de las comunidades cafeteras como de sus sistemas agrícolas para ser resilientes a estos cambios. Esto abarca desde educación sobre los impactos del cambio climático hasta apoyo para responder a los riesgos. Los ejemplos incluyen mejorar el riego y el almacenamiento de agua, brindar un mejor acceso a la información financiera y meteorológica, introducir nuevas variedades y apoyar programas de reforestación.

ADAPTACIÓN AL CAMBIO CLIMÁTICO

Otra preocupación es la aparición de enfermedades de las plantas como la roya del café y la proliferación de plagas como la broca del café. Sólo este escarabajo causa pérdidas por cientos de millones de dólares cada año.

Para combatir la aparición de plagas y enfermedades, los investigadores se centran en variedades más resistentes. Esta investigación también fomenta el uso de variedades que prosperan en condiciones específicas, como la altitud. Otro proyecto es la creación de un banco de genes para preservar la diversidad genética. Esto permitirá futuras investigaciones así como la incorporación de nueva información a los procesos productivos.

ADAPTACIÓN AL CAMBIO CLIMÁTICO

El cambio climático es una preocupación muy real para la producción de café y la industria lo enfrenta de frente. Con el compromiso de investigación y adaptación, estamos seguros de que disfrutará de su bebida favorita durante muchos años.